Me da miedo, porque se que no puedo controlarlo. Esa sublime sensación de dominar se desvanece contigo.
Cuando parece concluir, lo avivas. Estaba por dormir y me despiertas, yo escribo un punto pero tu acentúas un beso. Aquello que fuese divertido se ha tornado alucinante, y ahora ando por la vida rebosante.
Quedamos fuera del contexto de la monotonÃa, yo le añado un poco de malicia. El placer de contemplarte tiritar es lo que me mantiene loca de atrar